Otro año más nos fuimos hasta el bonito pueblo de Benaoján en el corazón de
la Serranía de Ronda, para disputar la IV Marcha Cueva del Gato. En esta
edición echamos mucho de menos a nuestros compañeros ausentes que por diversos
motivos no pudieron asistir (Hispano, Aguerrida, Soraya, Comecaminos y
Sin piernas) acudiendo Miguel “Tomate”, Ángel “legía” , Virginia “Fénix”
y Javi “NSLP”.
Llegamos sobre las 20:00 a Benaojan, encontrándonos con nuestra querida
Esther del equipo hermano Manteka.
Después de unas cuantas cañas de chocolate gentileza de Esther, recogimos
los dorsales en el pabellón del colegio, encontrándonos con nuestros grandes
amigos de mil y una batalla de Benaojan (Vallejo, Lairet, Javi, Ricardo,
Isa…), saludándonos efusivamente y conversando un largo rato.
Luego nos fuimos a nuestra sede de la localidad, el Bar “el Corneo” donde
brindamos por los ausentes y nos dimos un homenaje de las riquezas
gastronómicas de la localidad.
Después de una noche “agitada”, nos levantamos a las 7:00, tras el desayuno
y vestirnos de “romano” esperamos a Esther , llegando a los pocos minutos
Miguel “Tomate” y Fénix , que venía poca justa de tiempo y tenía aún que
recoger el dorsal habiendo una gran cola, perdiéndole la pista hasta su llegada
a meta.
Dentro del cajón de salida se vivía un magnifico ambiente y de reencuentro
de amigos que se ven de carrera en carrera. Vimos a nuestros hermanos Piratas
que estaban en primera línea, dirigiéndonos hacia ellos para saludarlos,
entablando una amena conversación y haciéndonos un montón de fotos,
sorprendiéndonos el inicio de la carrera en la “pole”, cosa que nos vino
bastante bien ya que conocíamos el trazado de pasadas ediciones y los primeros
6 kms discurren por un sendero estrecho muy pedregoso con una fuerte pendiente
donde hay que ir en fila de a uno, no habiendo espacio para poder
adelantar. Mientras subíamos pudimos ver la niebla como se asentaba en en el
fondo del valle.
Posteriormente nos introducimos en los llanos de Libar donde pudimos correr
a nuestras anchas, viendo a un gran número de personas cesta en
mano recolectando setas. Había bastantes y de gran tamaño.
En el tramo entre cortes y la Estación de Cortes, Javi NSLP, padeció un
caída sufriendo varias heridas, siendo lo más reseñable la de la rodilla,
hinchándosele inmediatamente, sobreponiéndose y teniendo que hacer un gran
esfuerzo para continuar y realizar los 30 km que le quedaba.
A medida que iba transcurriendo el día, aumentaba el calor, haciendo
estragos en muchos participantes sufrieran deshidratación acompañado de
la correspondietne "pájara".
En Jimera de Libar, pasamos por el sendero paralelo al río Guadiaro, un
entorno muy hermosos y lleno de paz que daban ganas de quedarse allí sentado
con los pies en remojo a la sombra de los arboles.
Continuamos camino en busca de la Estación de Benaojan por el sendero
paralelo a la vía de tren Algeciras-Ronda que transcurre por un angosto valle
fluvial, disfrutando de magníficos paisajes con el río como protagonista
principal.
Una vez pasada la Estación de Benaojan, ya se siente que la carrera esta
vista para sentencia aún así había que superar las duras rampas de la Cueva de
Gato que engarza con el camino viejo de Ronda.
Tuvimos suerte de poder entrar todos en meta, eso si cansados pero
satisfechos del trabajo realizado.
Felicitar a la organización por su gran trabajo y por la maravillosa acogida
que da a los participantes. Agradecer a los voluntarios su buen hacer y el
derroche simpatía. Como único lunar y que por ahora se esta repitiendo en
todas las ediciones es el asunto de que solo hay una sola ducha para todos los
participantes, formándose grandes colas y por su puesto agua fría, por lo que
uno acaba haciéndose el "lavado del Gato"
Seguidamente os dejo las impresiones de los compañeros:
Virginia "Fénix"
Para empezar tengo que comentar que en un principio
estaba muy ilusionada en hacer esta prueba porque era la primera vez que hacía
tantos kilómetros en marcha y tanto Hispano como yo, contábamos los días
esperando el día.
Luego surgió un "problema" y es que mi
compañero, Hispano, tuvo que trabajar ese día, así que me quedé sola ante el
peligro y me asaltaron las dudas. Además, días antes pronosticaban
lluvia, con lo cual, la cosa no pintaba muy bien.
Finalmente, el tiempo se arregló y me armé de
valor. Así pues, me levanté ese día a las 6:00 am. y después de prepararlo todo
y despedirme de mi compi, cogí el coche sobre las 7:00am. y tiré para Benaoján
ayudada del GPS, que me había preparado con la dirección.
Parecía que hacía frío, así que a la llegada me
abrigué y fui por el dorsal. Fue entonces, cuando me encontré con otros
compañeros de la Peña, Javi-NSLP, Ángel, Miguel y Esther. Les saludé
rápidamente, porque iba un poco tarde y después de pasar un poco de cola,
recogí el dorsal.
Eran ya, las 8:45am. y me quedaba muy poco
tiempo, así que me sellaron en la salida y fui rápidamente a dejar las bolsas
del dorsal en el coche y toda la ropa de abrigo que me había puesto,
porque empezó a hacer bastante calor, aunque me quedé con el chubasquero por si
llovía, cargando con él en la cintura toda la prueba, porque al final hizo un
día espléndido.
Por fin comenzó la carrera con un
"chupinazo" y empezamos. Mis compañeros iban delante y yo me
quedé bastante atrás porque cuando volví al cajón de salida había muchísima
gente y ya no pude llegar hasta ellos, así que fuimos cada uno por un
lado.
Nada más empezar, empezaron las subidas por una vía
romana y aunque no sé muy bien calcular, serían como 6 ó 7 kilómetros de subir
y subir, pero el paisaje era impresionante y la fila de marchadores subiendo
era interminable y super colorida.
Por fin, la cima y comenzó un buen tramo de llanos
en los que me dio tiempo a recuperar. Toda la carrera fui entre marcha rápida y
trotando, sobre todo en las cuestas abajo y llanos.
Pasamos por parajes verdaderamente impresionantes y
gran parte del recorrido fuimos bordeando el río.
El terreno era en su gran mayoría "un camino
de cabras", es decir super estrecho y bastante complicado, a mi
parecer.
Por último, llegamos a los alrededores de la Cueva
del Gato, y allí comenzamos la última subida, que también fue bastante empinada
y larga. Y una vez, arriba, una bajada muy empinada de asfalto, que según
decían los otros corredores, antes era de tierra y ahora estaba mucho
mejor.
Cuando llegué a esta bajada intenté volver a correr
pero en los primeros pasos sentí unos pinchazos en las rodillas y tuve que
bajarla apoyada en los bastones, porque empezó a doler bastante, sobre todo cuando
se empinaba mucho. Menos mal, que cuando llegué al pueblo y el terreno se
allanó, no me molestaba, así que pude volver a correr y entrar en meta
corriendo, como es de recibo.
Allí me estaban esperando mis compis, para darme el
recibimiento y hacernos las fotos, lo cual, les agradezco enormemente, porque
fue muy divertido y emocionante ver caras conocidas a la llegada.
Durante el recorrido, conocí mucha gente con la que
iba charlando de Algeciras, Benaoján, Ronda, ... Eso estuvo muy bien, porque aunque
iba sola, estuve acompañada en todo momento y lo pasé genial.
También, hubo mucha gente que hacía la broma al
leer el nombre de nuestra peña en la camiseta: "yo tampoco siento las
piernas", je,je.
Finalmente, despedida de los compañeros y al
comedor a por ¡¡el bocata de lomo y la cocacola!!
Fue un día muy interesante y diferente, lo pasé
muy bien, tan solo eché muchísimo de menos a mi compañero Hispano que no pudo
estar con nosotros por tema laboral y aunque fui enviándole fotos y tiempos
todo el camino, estoy segura que lo hubiera disfrutado muchísimo de haber
podido venir y nosotros de su compañía, sobre todo yo.
Ángel "legía"
Esta fue mi segunda edición, aunque tuve muchas dudas si realizaba o no la prueba, ya que llevaba más de dos meses que no hacia nada, pero haciendo honor a unos de los lemas de la Peña (entrenamos en las carreras) decidí tirarme a la plaza.
Durante toda la prueba estuve alternando marcha y carrera entrando en meta en algo más de siete horas, igualando practicamente el tiempo del año anterior.
Al pasar por los Llanos de Libar como buen aficionado a la recolección de setas, me entró un gran impulso de pararme al ver al personal con sus cestitas cogiendo setas aprovechando la lluvia del día anterior.
Miguel "Tomate"
Era mi primera prueba en la modalidad de carrera de montaña y en la distancia, ya que la mayor distancia que había hecho era media maratón y por asfalto.
Desde un principio salí muy fuerte, dejándome llevar por el ímpetu de los demás participantes, por lo que a mitad de carrera se me acabo la gasolina llevando las piernas muy cargadas y con continuos calambres lo que me impedía correr. Así que tuve que hacer andado el resto de carrera que me quedaba
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